Directivos de la Unidad Ejecutora para la Readecuación de La Barquita y Entornos (URBE) sostuvieron un encuentro con moradores de La Ciénaga para escuchar sus inquietudes y explicarles cómo las familias continuarán siendo trasladadas de la zona.
La reunión estuvo encabezada por el director ejecutivo de URBE, José González Cuadra, quien explicó que el traslado de los moradores de 480 viviendas de La Ciénaga iniciará este sábado 3 y el lunes 5 de agosto.
González Cuadra precisó que lo más importante era escuchar de manera directa a los habitantes del sector, “y ya públicamente han expresado que quieren el traslado”.
Los residentes en La Ciénaga agotaron turnos para expresar algunas opiniones e inquietudes, las cuales fueron atendidas por González Cuadra y los demás representantes de URBE.
“Parte de nuestro compromiso es trasladarlos con el dinero en sus manos”, explicó el director ejecutivo de URBE a los beneficiarios del proyecto de transformación urbana Nuevo Domingo Savio cuyo objetivo principal es sacar a estas personas de su estado actual de riesgo y que puedan iniciar un cambio positivo de vida.
En tanto, el personal del área social de URBE y las autoridades competentes, a su vez, acompañarán a las personas que serán trasladadas, procurando que cada una de las familias sean tratadas con el respeto que merecen.
El Nuevo Domingo Savio se trata de un conjunto de obras que mejorarán las condiciones de vida de 40,000 personas que viven en los barrios de La Ciénaga y Los Guandules, para las cuales el Gobierno construirá canchas deportivas, escuelas y liceos, parques, amplias calles, paradas de la OMSA con conexión al Metro y al Teleférico de Santo Domingo.
A las familias afectadas el Gobierno las compensa económicamente bajo el criterio de la composición de los hogares y los avalúos catastrales de las mejoras realizados por la Dirección General de Catastro Nacional.
El Nuevo Domingo Savio será convertido en un ejemplo de orden, seguridad y buena convivencia comunitaria.
El primer paso consiste en reubicar las viviendas en riesgo para liberar los espacios necesarios para garantizar una buena circulación.
En la segunda etapa, las familias de la zona serán beneficiadas con un correcto alumbrado y alcantarillado, parques, escuelas y estancias infantiles.
El proyecto de transformación urbana contempla la ejecución de un paseo, un parque fluvial y la avenida del Río.
Serán removidas 600 viviendas del interior del barrio. Esos espacios serán ocupados por las nuevas calles. De igual modo, se garantizará el derecho de sus habitantes a otros servicios básicos.
También la zona estará protegida por el Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad 911.
En el encuentro también participaron la coordinadora general de URBE, Patricia Cuevas, y el encargado de proyectos, Millet Juan.