Por- Ramona de Jesús
Desde que el presidente Luis Abinader asumió la cosa pública se comprometió a garantizar el libre ejercicio de la expresión y difusión del pensamiento de los hombres y mujeres que se dedican a la comunicación informativa el periodismo, y poner todo el empeño para que se haga con transparencia y apegado a la verdad para una respuesta directa a los cuestionamientos de los ciudadanos.
Hoy día determinados funcionarios que ocupan cargos públicos en oficinas públicas de las dependencias gubernametales en la provincia de MONTECRISTI, los cuales nos hacemos reservas de sus nombres en este artículo con ARROGANCIA, PREPOTENCIA Y ALTANERÍA se sienten molestos, desean estar privados y blindados de que periodistas, analistas, comentaristas de programas de radio y televisión, además de en que los de periódicos digitales y página de internet se realicen sus críticas y publicaciones de su mal accionar y el incorrecto ejercicio de sus atribuciones lo que contradice la desición del jefe de estado Luis Abinader.
Todo indica que algunos servidores públicos a la hora de ser designados en sus puestos de trabajo no estuvieron ni están preparados primero para desempeñar sus cargos y segundo para tolerar las críticas periodísticas que más que mal les hacen bien.
En esta publicación reiteramos y hacemos enfasis en lo dicho por el presidente de la República Dominicana Luis Abinader Corona, de que se compromete que el PERIODISMO en el país sea garantía de transparencia lo que a nuestro entender no le llega a los funcionarios de MONTECRISTI, que buscan por diferentes vías ejercer presión a la prensa con el objetivo de coartarles sus derechos y deberes establecidos en la ley 61 32 sobre la libre expresión y difusión del pensamiento y la propia Constitución Dominicana.
Nunca jamás quien utilizó la pluma para escribir este artículo, estará de acuerdo que para poder ejercer el periodismo y la comunicación informativa se ponga en juego la mentira, la maldad, la difamación y la moral de nuestros representantes en las oficinas públicas de la provincia de Montecristi.
Ahora bien como digo una cosa digo otra y es que nunca jamás, mientras realice la comunicación permitiré bajo ninguna circunstancia que aquellas personas que tienen cargos públicos de importancia en esta provincia noroestana ejerzan presión contra la PRENSA, al finalizar este artículo solo me resta decirle señores del gobierno trabajen bien para así beneficiar a la colectividad.
