El caso y trayectoria de nuestro querido Vladimir es más que especial, la historia de un niño que desde los 5 y 6 años laboraba en el campo con su abuelo en acciones más que pesada para persona de su edad, que permaneció ocho meses en un solo complejo antes de marcharse a otra organización y firmar por una “bagatela” es digno de ser contada.
Es por esto que Adcio Media que encabeza Rojo dan los toques finales para un documental sobre los días previos y momentos de su exaltación a Cooperstown, lo cual esperan finalizar para este mismo año.
Además, su vida será llevada al cine, pues la disparidad entre un niño que labraba la tierra con una aza, arriaba los becerros, montaba los caballos con una carrera en que en trece de 16 campañas culminó sobre los .300 en una época en que jugó limpio mientras muchos de sus colegas estelares salieron manchados con el síndrome de los esteroides es digna de ser contada en los cines.
Para los dominicanos es un gran honor ver la vida de un astro como vladimir en la pantalla grande y es una llevar su historia a futuras generaciones, ya que es un orgullo para nosotros tener a una persona de la calidad moral y humana de guerrero.
Fuente: Pedro G. Briceño
Don Gregorio, Nizao